El Departamento de Justicia (DOJ), de Estados Unidos, retiró una demanda contra Southwest Airlines que acusaba a la compañía de operar vuelos con retrasos crónicos, una práctica prohibida bajo la normativa del Departamento de Transporte (DOT). La decisión marca un giro significativo en una acción legal impulsada en los últimos días de la Administración Biden. Cabe recordar que la denuncia, presentada en enero pasado, señalaba que Southwest mantenía horarios de vuelos poco realistas. En concreto, el DOT identificó dos vuelos operados durante cinco meses en 2022 que incumplían la normativa federal por retrasos reiterados: uno entre el aeropuerto Chicago Midway y Oakland, California; y otro entre Baltimore y Cleveland. Según las reglas del DOT, un vuelo se considera crónicamente retrasado si se opera al menos 10 veces al mes y llega con más de 30 minutos de retraso en al menos el 50% de las ocasiones. “Los dos vuelos en cuestión ocurrieron hace años, en un contexto en el que la industria enfrentó desafíos sin precedentes debido a la pandemia y, en muchos casos, los retrasos se debieron a causas fuera del control de Southwest”, afirmó la aerolínea en un comunicado. Cabe recordar que el DOT impuso multas por prácticas similares. Frontier Airlines fue multada con US$ 650 mil por operar varios vuelos crónicamente retrasados. De ese total, US$ 325 mil se deben pagar inmediatamente, y el resto solo si la aerolínea incurre nuevamente en la infracción en los próximos tres años. Del mismo modo, JetBlue Airways recibió una multa de US$ 2 millones por cuatro vuelos con retrasos crónicos en rutas nacionales. La aerolínea acordó pagar US$ 1 millón en efectivo y ofrecer vales de al menos US$ 75 a los pasajeros afectados por cancelaciones o retrasos superiores a tres horas.
